miércoles, 30 de junio de 2010

Miradas que cegan


Simplemente hay cosas que no puedo evitar, es totalmente innato en mí. No es mi intención ni tampoco mi decisión, soy así y lo siento de sobremanera. Por mucho tiempo trate de cambiar y fue ahí cuando me dí cuenta que las personas no cambian. Me siento muy mal cuando veo tu cara con aquella expresión, tus ojos mirándome de una manera que no me gusta, tratando de explicar por qué, si no hay ninguna explicación, sólo que a veces soy una tonta que no sabe aprovechar el momento o simplemente lo echa todo a perder.
Mi personalidad no es de las más fáciles de llevar, mi genio(mi mal genio) mucho menos y me da rabia pensar y saber que tu humor cambia por mis tontos enojos.
Tienes una paciencia que quisiera tener, a pesar de todo siempre al final me sacas una sonrisa. Me es difícil pedir disculpas, es que las circunstancias de la vida han hecho que mi orgullo haya crecido y las cosas que antes eran fáciles se hagan mucho más complicadas de lo que en realidad son.

Simplemente hay una cosa que no puedo evitar y es sentir cada vez que te miro una sensación tan linda que mis ojos nunca quisieran dejar de mirar los tuyos, tus ojos me dan una paz inexplicable y son una de las cosas que me cegan a la realidad y me hacen viajar a otro mundo del que quisiera nunca regresar.


Véronique

lunes, 28 de junio de 2010

A volar



Un mes de:

"Días de sorpresas, felicidad y amor"


Han sido momentos inborrables, días hermosos y sentimientos inexplicables.
Gracias por hacerme tan feliz!
Nuestro amor volará muy muy lejos.



Véronique & Nacho

domingo, 27 de junio de 2010

A la créme!

"Bailando al son de improvisadas canciones, nuestras risas y sonrisas cómplices adornaban nuestros rostros en la oscuridad,
en un rincón del lugar que nos juntó, el mismo que nuestra historia vió crecer, me cantaste bajito y al oído.
Bailamos lento y pausado.

Degustando sabores, probando dulces, salados y amargos,
descubrí un sabor desconocido, un toque de ternura y alegría,
dulce y salado se fusionaron y en la luna de miel, probaron Vero y Nacho a la créme!"




En una mesa para dos, una noche, él pide un capuccino, ella pide lo mismo.
Sentados uno frente al otro, mirándose directamente a los ojos, hablan de cosas al azar, risas vienen y van.
Cada uno se refleja en la mirada del otro, su mirada queda detenida en sus grandes y dilatadas pupilas. Esbozando una sonrisa, callada y tímida se detiene en sus pensamientos.
Está sintiendo algo que ya había olvidado cierto.

Véronique

martes, 22 de junio de 2010

Primer día de invierno



El comienzo del invierno no podría haber sido mejor.

A un mes y un día de haber recorrido esa calle, volvimos a caminar por ahí y vimos la marca que en el suelo habíamos dejado, estaba borrosa y casi ya no se leía pero para nosotros era la misma marca inborrable y siempre visible que habíamos dejado hace un tiempo atrás. Me sorprendí del tiempo casi imperceptible que pasó desde aquella tarde hasta ahora y que el destino nos llevará después de un mes ahí nuevamente. Quién hubiera pensado todas las cosas que pasarían en ese mes y un día.
El invierno llegó con una brisa llena de sorpresas y cosas nuevas por vivir y descubrir.
Quisiera que este invierno sea diferente a otros, quiero que la lluvia me canté su mejor canción y que el viento me traiga los mejores augurios. Quiero aprovechar como nunca esta época.
El primer día de invierno que pasamos juntos fue uno de esos días que nunca olvidaré, fue un día de risas y declaraciones, de sorpresas y de regalos, de celebraciones y triunfos. Fue una tarde de viernes llevada al primer día de la semana, a ese día que nadie quiere que llegue pero que sin embargo yo espero con ansiada emoción.

Cumplimos la promesa de dejar nuevamente nuestro rastro por la calle de los corazones, por supuesto el de nosotros no podía faltar.


Véronique

domingo, 20 de junio de 2010

Bonsoir !



A veces siento tu olor y busco el lugar dónde pueda encontrarlo. Y en eso, me doy cuenta que mi ropa huele a tí, mis manos, mis guantes y en la punta de mi nariz está tu olor acompañándome a donde vaya. Aunque no me creas, sueño contigo, siempre estás en mis sueños y en mi realidad, estás en mi mente y en un lugar mucho más profundo también.

Me gusta la noche, su silencio,su oscuridad, su aroma, su melodía.


En estos días cuando la noche cae he pensado mucho en todo y poco en nada... y
recuerdo muchas cosas, recuerdo los días en que esperamos ver al sol esconderse y permanecemos abrazados, deteniendo el momento de irnos. Un día observaba las nubes y encuentro figuras, tú miras el cielo y yo te observo y pienso en tí y en todo lo que haces por mí, todo para sacarme una sonrisa y así verme feliz. Recuerdo todos los días las cosas que me dices, esas lindas palabras que quedan en mi mente dando vueltas y que llenan ese pedacito de corazón que tenía vacío desde hace mucho mucho tiempo.
Cada noche para mí es el comienzo de una nueva historia. Cada noche
antes de dormir e ir a viajar hacia los más recónditos rincones de nuestra conciencia, comienzo en una frase esa historia...y frente a mi veo un mensaje. Ese mensaje que me desea un lindo viaje de noche y cuando cierro mis ojos queda ahí mirándome desde el comienzo hasta el final del día.

En la noche recuerdo el día que está terminando y empiezo a hacer un recuento de
él y siempre llego a una misma conclusión; aunque el día haya sido feo, aunque las cosas no salgan como he querido, aunque me haya levantado con el pie equivocado, aunque por alguna razón tonta odie al mundo y me enoje, siempre aparace una persona que me hace feliz y hace que me día termine como el mejor de todos. Y esa persona eres tú.


Véronique

miércoles, 16 de junio de 2010

Pies desteñidos


Entre líneas, entre los espacios que quedan en blanco, entre ese espacio...
El papel se corroe a la altura de mi pecho. Mis ojos se delatan al construir todo esto. Y no es esto lo que quiero decir, tampoco lo que decidí.
Veo que el reloj sigue dando vueltas y han pasado diez minutos sin coherencia ni contexto. No es que tenga pretextos, siempre supe que no sirvo para guardar silencio.
Ese silencio (que nadie escucha) es aquel que no guardo, es aquel silencio que se lee entre líneas y entre espacios.
Se ha muerto, en el alza de las estrellas, la magia de sus alas.

Sus pies han quedado en calma y se ven sobre la silla sin color ni gracia.
En el caminar de su ausencia, sus pasos en siesta,
se quedaron en su última danza; una danza lejana y siniestra.


Extraño volar sin alas, extraño la danza.

Véronique

martes, 15 de junio de 2010

Viaje al sur



En los vidrios habían huellas de lluvias pasadas, los asientos gastados y el ambiente un tanto ahogado.
En un tren de Memorias pasadas - huellas gastadas - voces ahogadas - dos personas enamoradas. El reloj daba el medio día de un día martes de árboles desnudos y un sol inusual. Quisimos huir un momento de los ruidos de esta ciudad y cumplir una de nuestras tantas locas promesas.
En la línea de partida, mirando el horizonte, decidimos embarcarnos hacia un viaje; un viaje sin mapa, un viaje sin fin, un viaje en tren al sur.
Y...
Era el sentimiento de viajar contigo,
era ese ambiente tranquilo de mañana,
era la incertidumbre de nuestro destino,
era tu mano acariciando la mía,
era tu voz a lo largo del viaje,
era esa rosa rozando mi nariz y regalando su perfume
y ahora en mis manos, la que miraba de vez en cuando nuestras caras,
era esa pulsera en mi mano y en la tuya,
era ese aroma a café que nos dió la bienvenida,
era ese caminar sin sentido por una ciudad desconocida,
era esa promesa que quedó presente en mi mente,
era ese mensaje dejado en Graneros en memoria de este día,
era nuestra locura de querernos,
era todo eso y más, eras tú, eres tú y serás tú el que me enamore cada día.


(01/06/2010)

Véronique

jueves, 10 de junio de 2010

Insoportable


Hay días en los que las calles son más angostas, el aire es más denso, las nubes son más grises, el viento sopla en contra y yo soy más insoportable.
Me canso de ver ese mal pintado cuadro de caras desagradables de personas desagradables, la molestia de sentir esas voces incoherentes que es explayan sin sentido esperando a que las escuches por el sólo hecho de estar dirigiendose a una audiencia atenta de caras bobas, me tiene sorda a muchas cosas, y es que yo escucho a quien quiero escuchar y hablo con quien quiero hablar. Esas maneras de vivir diferentes que por supuesto respeto pero no comparto. Los sueños a medias que me tienen colgando de un hilo, los pensamientos ausentes que sin comentarios pueden acaparar todo el espacio en mi mente, y los grandes quiebres de escenas que acortan mi día a un céntimo de segundo y todo esto sobre un espectáculo de diaria rutina que tengo que soportar.
Y así un día cualquiera no doy más y no puedo evitar convertir las horas de callada obsevación a mi alrededor, en una merecida y silenciosa reflexión en mi mente, dejando atrás todo esa mierda de mundo que me hace huir de allí y de aquí.
Todo esto lamentamente se refleja en mi cara, y el cuerpo inteligentemente, por no decir desgraciadamente, habla por nosotros y primero que nosotros.
Sin embargo, quisiera guardar un espacio en mi bolsillo, ese espacio que cambia mi expresión, me saca una sonrisa y me alegra el día, ese pedacito de cielo que me regalas cada vez que me miras y me abrazas.
Hay veces que la gente me estorba y la odio con ganas, hasta tal punto que no quiero más nada de la vida.
Eso es raramente y dementemente lo que me sucede.

Disculpa...

Véronique

domingo, 6 de junio de 2010

Madrugada

Con ojos cerrados y dormidos, te busqué.
Entre la noche, la luna llena, tu recuerdo en mi mente y mis ganas de abrazarte no podía dejar de cumplir mi promesa.
No recuerdo mis manos, no recuerdo mis pasos, no recuerdo cómo llegué ahí pero te encontré, te ví.
Los detalles son secretos, sólo espero que sepas que mis promesas no son en vano, y cada una de las palabras que he dicho tampoco.

Siguiendo el curso de la noche, entré a la madrugada y te juro que si fuera por mí, no saldría nunca más de este sueño.

Véronique